dimecres, de febrer 20, 2008

Sebald sobre Walser

«Cómo se puede comprender a un autor que estaba tan acosado por las sombras y que, con independencia de ello, esparció por todas partes la luz más amable, un autor que escribía humoradas de pura desesperación, que casi siempre escribió lo mismo y nunca se repitió, para quien sus propios pensamientos, aguzados en minucias, eran incomprensibles, que estaba por completo con los pies en el suelo y se perdía incondicionalmente en el aire, cuya prosa tenía la cualidad de disolverse al ser leída, de forma que sólo unas horas después de su lectura apenas se podían recordar los personajes, acontecimientos y cosas efímeras de que se había hablado. [...] Todo lo que está en esos libros incomparables tiene tendencia, como quizás hubiera dicho su autor, a evaporarse.»


W.G. Sebald, El paseante solitario. En recuerdo de Robert Walser (pp. 16, 17)

3 comentaris:

Anònim ha dit...

Hay un libro, 'Paseos con Robert Walser', de Carl Seelig (Siruela): memorable. El de Sebald no lo conocía.

Sobre el texto de Karl Kraus del otro día, magnífico. Yo lo conocía en la versión en catalán que cita Walter Benjamin en 'Assaigs de literatura contemporania' (Ed. Columna). No sé dónde he oído rumores de que Acantilado está preparando una antología completita de los escritos de Kraus para La Antorcha.

Tampoco hay que perderse aquello que piensa Canetti sobre Kraus en 'La antorcha al oído', uno de sus libros de memorias.

Ayer recibí 'Gente de las pusztas', que pedí por cuestro artículo sobre el libro. A ver qué tal.

Y qué más... ah, sí: sobre el escrito de la literatura y la mentira, disiento en casi todo. A ver si me topo con algo de tiempo y puedo explicarme.

Salutacions des de la Ribera Baixa.

David Robert ha dit...

Es un placer encontrar personas con gustos tan similares...

El libro de Seelig es muy interesante, sí; quizás el mejor modo de aproximarse a la humanidad de Walser. Hace tiempo le dediqué una breve entrada.

La noticia sobre la antología de Die Fackel yo la vi en un comentario de Arcadi Espada, pero no he sabido encontrar más información. Ya existe una recopilación de sus artículos, con una traducción un tanto personal. Espero que Vallcorba haya elegido a Kovacsics como traductor, su versión de Los últimos días de la humanidad es una inmejorable carta de presentación.

Coincido también con tu apreciación sobre Canetti. Sus memorias rebosan mitomanía, y Karl Kraus es uno de sus ídolos (reemplazado después por el enigmático doctor Sonne). En un post antiguo cité el fragmento donde relata el efecto que le produjo asistir por primera vez a una de las lecturas de Kraus.

Y todavía otra conexión, para cerrar el círculo: Sebald sobre Canetti.

Disculpa por las autocitas :-) Espero tus comentarios sobre las tesis de Vizinczey.

Saludos desde München.

Anònim ha dit...

En el libro de Seelig hay un momento que me parece crucial, cuando la hermana acompaña a Walser a internarlo en el sanatorio por primera vez y éste le pregunta: ¿Estás segura de que hacemos lo apropiado?
En esa pregunta está todo Walser.

Las autocitas, viniendo de vosotros (¿sois dos? ¿quién escribe?), se agradecen.

Saludos.